Conquistar el Mundo

Frio y calculador para los que me aprecian; Insensible, falso y sobretodo manipulador para los que no me aprecian. En algun caso alguna persona ha llegado a calificarme de sensible. El alcohol (o el enamoramiento, que es bastante peor que la borrachera) debia nublar de forma importante su juicio en ese momento. Otros datos mas objetivos: varon, nacido en 1978, residiendo en Barcelona.

martes, junio 06, 2006

¡¡¡La mierda del alcalde!!! ¡¡¡La isla del ministro!!!

Resulta sorprendente como la mente es capaz de lanzar contra ti ideas enterradas durante años.

Esta tarde he retrocedido 10 años en el tiempo al ver un corto promocional de una nueva pelicula de superman.

A duras penas he podido evitar la carcajada al recordar ese episodio.

Reconozco que ignoro el nombre del poeta urbano que engendró semejante discurso preo su talento merece un reconocimiento universal que siempre se le ha negado. Desde aqui, rompo una lanza por él y le deseo la mejor de las suertes en su carrera.

Bajo la apariencia de dignísimo y vulgar taxista, nuestro héroe de hoy recorría las calles de la Isla Mágica cruzando y descruzando los caminos de los miles de turistas que verano tras verano buscando allí un poco de calor, cuanto menos solar, y porque negarlo, también humano y hasta farmacológico...

Pero hasta en Ibiza llueve también... Y eran esas noches frescas, húmedas, con las calles de algunos barrios convertidas en un barrizal por problemas en las conducciones de aguas subterraneas las que le hacían sacar toda la genialidad que atesoraba.

"¡¡¡La mierda del alcalde!!! ¡¡¡La isla del ministro!!!" gritaba a pleno pulmón. Sin embargo, magnánimo en su grandeza, conocedor de nuestra incapacidad para comprender sus ideas, descendió del olimpo de los genios para hacernos partícipes de su arte y procedió a explicarnos el porque de su encendida proclama.

Abel Matutes, por aquel momento Ministro de Asuntos Exteriores, era propietario de la mayoría del suelo urbanizable de la isla y controlaba la práctica totalidad del negocio inmobiliario de la zona. Habia sido alcalde de la capital durante la decada de los 70 y 80 y obviamente poseía aun una buena cuota de poder en la administración local.

Durante años, el ayuntamiento se había dedicado a llenar los bolsillos de Matutes y asociados y había descuidado las necesidades de los vecinos. El alcantarillado estaba en mal estado y cada vez que llovía, las calles de la zona baja se llenaban de agua, barro y basura.

Una lección de historia, una denuncia social, un discurso político, una reclamación enérgica, un anticipo de escándalos venideros (tal vez si hubiese vivido en Marbella otro gallo le hubiera cantado a Don Jesús Gil...). Todo ello en 8 palabras... y sin dejar de conducir...

He tenido tentaciones de acabar el escrito aqui, negando la posibilidad de conocer la relación entre el héroe de la capa y los calzones rojos y un excepcional taxista ibicenco...

Seguramente hubiese sido mejor hacerlo, porque explicarlo no añade nada de interés. Es más. a mi me ha costado un rato seguir el curso de mis recuerdos hasta lograr la conexión...

Esa noche salimos del taxi riéndonos a mandíbula desencajada (no es para menos). Uno de nosotros (¡¡¡Pau, qué grande eres!!!), con la ayuda inestimable de su alta concentración de etanol en sangre se dedicó a chillar al oido de todo el mundo que se le acercó las 8 palabras de poder.

Azarosamente, encontró un grupo de jovencitas que hablaban español y estaban lo suficientemente sobrias como para entenderlo y preguntarle por el significado de su exclusiva formula de ligue.

Creo que eran tres, vivían en Huesca y que pasaron unos días con nosotros. Una de ellas llevaba una camiseta de Superman esa noche, fetiche sexual de otro de mis amigos.

No recuerdo ni sus nombres, ni sus caras, ni nada más de ellas. El resplandor cegador del genio al volante las ha eclipsado por completo en mis recuerdos.

Una vez más: "¡¡¡La mierda del alcalde!!! ¡¡¡La isla del ministro!!!"

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