Conquistar el Mundo

Frio y calculador para los que me aprecian; Insensible, falso y sobretodo manipulador para los que no me aprecian. En algun caso alguna persona ha llegado a calificarme de sensible. El alcohol (o el enamoramiento, que es bastante peor que la borrachera) debia nublar de forma importante su juicio en ese momento. Otros datos mas objetivos: varon, nacido en 1978, residiendo en Barcelona.

martes, julio 04, 2006

Creciendo...

Durante muchos años, me harté de repetir a quien quiso escucharme que gastaría mi primer millón en un coche.

Trabajé doblando turno durante tres meses de verano, unas 80 horas a la semana y logré ahorrar lo suficiente para aspirar a un Porsche 911 de segunda mano con bastantes kilómetros. Llegué incluso a probarlo.

En el último momento, decidí dejar el dinero en el banco y seguir usando el autobús. Algún atisbo de madurez me hizo ver que habría mil formas mejores de gastar ese dinero en el futuro, así que borré la táctica 'deslumbrar con deportivo' de las posibilidades de ligue y me concentré en otras opciones.

Años más tarde, mirando en perspectiva, creo que fue una de las primeras veces que fui capaz de enfocar mi punto de vista un poco más allá de lo que tenía delante de mis narices. Aun así, no dejé de hacerlo por mí, única y exclusivamente por mi mismo. A la postre, esos 7.000 euros me han ayudado a comer mientras terminaba la carrera, y por mucha ilusión que me hiciera mi bólido, creo que dejarlo en el concesionario fue una feliz idea.

Ahora acabo de renunciar a otro de mis sueños de niñez (y este bastante mas trascendente que un coche), un imposible que un día se materializa delante de ti esperando que alargues la mano y lo agarres al vuelo...

Y cuando ya lo acaricias, te das cuenta que el niño que soñaba despierto ha cambiado... Lo que antes parecía fácil y claro, ahora ya no es ni tan sencillo, ni tan cristalino...

Creo, no, afirmo rotundamente, que sigo siendo tan egoísta como siempre (y eso no va a cambiar en 1000 años). Sin embargo, en algún momento empecé a incluir a mi compañera en mis cálculos. Durante estos años ha sido capaz de devolverme con creces todos los esfuerzos dedicados a ella, y eso ha complicado una decisión que hace unos años hubiese sido inmediata hasta hacerla cambiar de sentido...

No se hasta que punto se podría llamar a esto crecer y hasta que punto se podría llamar estar enamorado. Poco importa el nombre, pero resulta evidente que a veces (o siempre) es más fácil ser Peter Pan...

Ahora únicamente puedo esperar no haberme equivocado. Y si en algún momento pienso que lo hice, la culpa habrá sido mía, y solo mía.

1 comentarios:

  • A las 6:52 p. m. , Blogger Ysondra ha dicho...

    En fin...

    Todos tenemos sueños de la niñez, pero con elt iempo cambiamos unos por otros. Debe ser la madurez, o algún tipo de enfermedad mental en todo caso.

    El otro día me quedé mirando a ver qué andarías pensando que no has dicho.

    No creo que te vayas a arrepentir en el futuro de lo que has decidido. No te veo una persona que se regodee en las cosas que podría haber hecho y no hizo, eso es -si cabe- más rasgo mío que tuyo.

    Me ha gustado este pensamiento. Me gusta ver que aun hay personas capaces de incluir a la pareja como variable de la ecuación total.

    Supongo que dejaste de cumplir ese sueño en pro de uno que, si bien no tenías cuando niño, está cada vez más cerca. Estoy segura de que ese también muchísimo la pena.

    Mucha gente quizás daría lo indecible por lo que dejaste atrás, pero muchísimas más lo darían por lo que tienes delante.

    Meow!

    Ni retirada ni rendición!

     

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio